sábado, 29 de octubre de 2011

Cinco millones

... de parados, o casi, según los datos con los que hemos desayunado hoy. ¿Dónde está la Ministra que decía no hace mucho que no llegaríamos a los cuatro (4) millones? ¿Sigue siendo Ministra?

lunes, 24 de octubre de 2011

Tan humana

La escritora Lucía Etxebarría suele ser un filón para el comentarista perplejo, y este fin de semana ha vuelto a colmar las expectativas en un semanario cuché. Dice: "Pero el que una vez habitó en lo sagrado vive en lo sagrado para siempre. Así que, cuando me pongo fatal, me voy a la iglesia de enfrente a rezarle a la Virgen. Es un condicionamiento reflejo. No es que crea exactamente en ella, pero sí en una fuerza femenina que me puede ayudar y a la que veo en esa imagen, porque es la que me han enseñado a amar y en la que me resulta más fácil refugiarme".

Interesante reflexión, que pone de manifiesto lo tremendamente humano de la divinidad según la revelación católica. ¡Cuánto consuelo y fuerza encontraría Lucía si, además, creyera exactamente en Ella!

Arrepentimiento

Creo que ya escribí sobre esto, sobre que mucha de esa gente a la que entrevistan en diarios y revistas manifiesta no arrepentirse de nada de su vida pasada. Con frecuencia, además, se trata de personas a las que el sol ya solo da en la espalda, incluso solo allí donde la espalda pierde su honesto nombre.


A esta larga lista de contumaces e irredentos se ha apuntado recientemente el mismísimo ministro de Fomento, José Blanco, al afirmar, acuciado por ciertas denuncias de corrupción, que es católico y, como tal, se examina todos los días y no encuentra nada de qué arrepentirse.


Examinarse es buena cosa, en mi opinión; pero si al hacerlo uno no halla motivo alguno de compunción, debería sospechar que no se examina bien, al menos vista mi experiencia personal y la de otros muchos en estas lides. Es la impresión que me da el inmaculado resultado del examen del señor ministro, tan blanco como su apellido.

viernes, 7 de octubre de 2011

Cornuda

Alternativa cornuta, la llaman los italianos, según tengo entendido, que si no te empitona un cuerno, lo hace el otro. En estos tiempos de vacas flacas, en los que no hay ningún José al que acudir (Merkel no da la talla), todas las alternativas parecen del tipo que en castizo expresamos como "la solución es peor que la enfermedad", o "de Guatemala a Guatepeor".


Y, sin embargo, también se dan alternativas de las llamadas de "imposibilidad metafísica", lo que sitúa nuestras desgracias en su verdadero estado de inapelabilidad. Si no lo creen, vean, vean este cartel: