"Rechazar el islam es insultar a Dios. No permitiremos que Dios sea humillado. Este hombre debe morir".
Lo ha dicho Abdul Raulf, un clérigo afgano "moderado" (ha estado tres veces en la cárcel por oponerse a los talibanes), respecto al caso de Abdul Rahman, condenado a muerte por convertirse al cristianismo.
Aún hay quien piensa en la alianza de civilizaciones.
Muy bien, Alberto. Sigue asì: tus comentarios son siempre muy sencillos y claros. En un mundo que vende humo y mentiras es muy importante saber hablar de manera distincta.
ResponderEliminarUn abrazo en Cristo Rey desde Italia
Icjem
Gracias, es consolador encontrar personas que están en la misma onda, porque el mundo cae en el absurdo a fuerza de no pensar y parece que somos pocos los que nos damos cuenta.
ResponderEliminarHola! Yo penso que la alianza de civilizaciones es buena pero hay gente que no es buena en todas las civilizationes. No poderemos olvidar que nosoutros habemos combatido los 'indifideles' e ellos estan passado por una Dark Age tanbien. Son las gentes que tienen interesses que se oponen a un entendimiento entre civilizationes.
ResponderEliminarPerdona mi linguaje pero no lo se escribir. Soy portuguesa e además de tenermos nuestros payses juntos, nuestra lengua nos es mucho conocida e difundida.
Espero que me has comprendido.
Gracias!
Te he comprendido estupendamente, ojalá yo supiera escribir en portugués la mitad de bien; he de confesar que he estado en tu maravilloso país en cuatro ocasiones, una semana cada vez, y con vergüenza tengo que decir que no he aprendido casi nada de tu precioso idioma, y eso que pienso que es una pena que siendo vecinos nos ignoremos tanto, por lo menos los españoles no nos portamos bien, y eso debería cambiar.
ResponderEliminarEn cuanto a la "alianza de civilizaciones"... Ojalá pudiéramos entendernos todos los países del mundo, y conviene trabajar en ese sentido; pero no hay que ser ingenuos, los musulmanes, por ahora, no están a favor.
La alianza de civilizaciones se produjo así: el que le redactaba el discurso que Zapatero debía pronunciar en la ONU, en una espera se le ocurrió añadir lo de la alianza, por que así quedaba mejor...
ResponderEliminarNo es tan sencillo.
Lo que hay detrás de la famosa alianza es una propuesta de Gobierno Mundial. ¿Quién cree que, realmente, los islamistas sean una amenaza real? ¿Quién vio aquél ejército de risa, los pobres soldados de Irak? Eso no es un enemigo a temer; es una "cabeza de turco.
Los moros están en otra onda. Si uno bucea en su cabeza puede encontrarse con lo que sigue:
Entendiendo a los moros: La oposición frontal no es hacia el cristianismo sino hacia Occidente. ¿Quién es el malo?
Vamos a analizar:
Decimos que occidente, se quiera o no, tiene raíces cristianas. Mirando a occidente deberíamos concluir que de cristiano tiene muy poco.
Se mata a los niños antes de que puedan defenderse, hablar, o mirarte (nos referimos al aborto); y se mata con dinero público. Se aborta a espaldas de los padres. Siendo la poligamia un tabú social, se anima a que los jóvenes se den a la promiscuidad administrando preservativos y píldoras abortivas en los institutos y dispensarios médicos.
Se puede decir cualquier cosa de cualquiera en aras de la libertad de expresión: vamos, que mientras te mean debes decir que llueve; ¿cuánta libertad de prensa cabe por qué cantidad de respeto a los derechos de nuestros semejantes, que conviven con nosotros compartiendo la misma aldea global?
Se vive de espaldas a los hijos ya que la madre y el padre trabajan y no tienen tiempo: prefieren contratar a alguien que ocupa su lugar; así, no se educa a los hijos. Y se le echa la culpa al colegio y a la educación.
La pornografía aparece por todos sitios; hay películas verdes a cualquier hora, sin importar que la audiencia sea menor o no. La mujer aparece desnuda (y ahora también el hombre) despojándola de su ser persona, simplemente mostrándose como un objeto de deseo. Y todo ello vestido de una conquista social moderna.
Satán es un personaje simpático: aparecen monigotes de demonios para colgarlos por todos sitios; la gente se disfraza de demonio; la mirada de satán aparece por doquier ("no fear"); la sociedad acepta "demonizarse" sin obstáculos. Pero si hay alguien que se rebele defendiendo un criterio propio y distinto al de la mayoría, (por ejemplo, la Iglesia Católica) entonces se le demoniza de verdad...
La juventud es objeto de abyecta perversión: se les ha animado al consumo de estupefacientes, alcohol y sexo (con preservativos), unido a música rock (a menudo satánica). Esto se ve en occidente como una conquista de las libertades.
Los occidentales se desmarcan de su propia religión; ahora aseguran que no tienen nada que ver con ella, que son laicos. Se come en occidente de caprichos: mira qué gordos están; si siguen creciendo no van a poder moverse de casa.
Aberración equivale a conquista de la libertad: Los hombres se casan con los hombres. Y se pide que se acepte lo que no es normal, como normal.
El matrimonio es algo demasiado fuerte para ser asumido como unión del hombre y la mujer para toda la vida.
Los hijos son un castigo, una carga inaguantable; uno debe hacer todo lo posible para no tener hijos; luego, si vienen, hay que aprender a disfrutarlos y, si se puede, a quererlos (qué remedio).
En occidente no se sabe qué hacer con el dinero: se vive obsesionado con comprar cosas que no se necesitan. Como civilización, se gastan el dinero en guerras absurdas contra países islámicos; además apoyan a Israel, un país que contra toda lógica busca exterminar el estado islámico de Palestina, que fue obligado por occidente en 1945 a aceptarles en su territorio.
En su cabeza los moros son, por lo menos coherentes. Piensan:
Prefiero ser Islámico aunque tenga que vivir más pobre;
mis mujeres me atenderán.
Alá es mi Dios y Mahoma, su profeta: él se apiadará de mí y me llevará al paraíso (expréss, si logro cargarme a alguno de estos occidentales).
La ablación es un mal menor;
la poligamia es necesaria para crecer, aunque discrimine a las mujeres: es ideológicamente correcta.
Que el prepotente y acomodado primer mundo se ría con chulesco racismo de los nuevos parias del cuarto mundo (estos moros que llamáis, están mal pagados y os sirven en vuestras casas y ciudades como metecos sin derechos) clama al cielo.
Cuando un anfitrión invita a alguien a su casa (como han hecho los europeos con nosotros, esta nueva clase de servicio manual y doméstico, mayoritariamente musulmana) no tiene derecho a insultar a sus huéspedes ni debe tomarse la libertad de humillarles, de ridiculizarles en público o de robarles sus pobres señas de identidad vulnerable.
¿Qué me cuentas de su racismo? Mira cómo se ríen de nosotros: ¿Y quién conduce?
En un coche van un moro, un negro y un gitano. - ¿Quién conduce? - La Guardia civil.
He hecho estas mismas reflexiones por ahí (concretamente en blogs de El Mundo). Pienso que se basan en hechos, pero, para mi gran sorpresa, la única respuesta fue su descalificación como opusdeístas... Espero que el día que les deje de dar vueltas la cabeza, ésta se les quede mirando hacia adelante.
Escrito por Juan F. Fernández
Y sin embargo, creen que occidente es cristiano -y en parte lo es, aún, aunque enloquecido-; y de todas formas su guerra es contra el infiel, cristiano o no, pero más si es cristiano, porque es un hereje, que es peor que un incrédulo.
ResponderEliminarAsí que al tanto.