Tener fe en Dios nunca ha sido asunto pacífico, y menos ahora; pero para tener fe en la Ciencia como tanta gente tiene, hay que ser muy crédulos. Justo el día en que celebramos a Darwin, un equipo internacional de científicos asegura que nuestro parecido con los chimpancés es 10 veces menor de lo que se creía hasta ayer. Vaya, monos; pero menos, 10 veces menos, por ahora.
A ver qué cara ponen ahora los del “proyecto simio”.
Y para trasplantes, siguen siendo mejores los cerdos.
Por supuesto que son mejores los cerdos. Está más que demostrado que bioquímicamente somos casi similares al cerdo, mucho más que al mono. Y viendo a mucho político español, no sólo bioquímicamente.
ResponderEliminarPobres cerdos, con lo ricos que están. Algunos políticos (bastantes), a lo que se parecen más es a las ratas...
ResponderEliminarCreo que la cuestión del cerdo o del mono es de matiz... Y supongo que todo el bombo que se ha dado al cumple de Darwin no es más que para presentarle como el único que se atrevió a alzar la voz contra... una sociedad oscura o yo qué sé.
ResponderEliminarDe cualquier forma, no creo que ahora los ateos tengan una fe ciega en la ciencia. Creo que eso ha pasado.
Puede que haya pasado, sí; quizá ahora se lleva más el relativismo, lo que nos deja en manos de absolutistas de cualquier cosa. Yo casi prefiero saber a qué atenerme, lo que produce más miedo es no saber a qué nos enfrentamos.
ResponderEliminarOye, me ha gustado mucho lo poco que he visto de tu blog, muy estimulante, lo he guardado en favoritos para verlo con más detenimiento... algún día.