Carta en El País
Margarita Benedicto - Madrid - 04/08/2007
Soy una lectora habitual de su periódico, ginecóloga en un hospital público, en donde se vienen realizando interrupciones voluntarias de la gestación desde la aprobación de la ley. Nunca me ha gustado la forma en la que tratan las noticias médicas, pero el pasado día 1 se ha traspasado un límite, al ser el propio editorial del diario, Aborta como puedas, el que insta, nada menos que al ministerio fiscal, a investigar a los médicos sobre su supuesta objeción de conciencia. Todo ello aduciendo medias verdades y datos no contrastados que contribuyen a la manipulación de la opinión pública.
1. Como todo el mundo sabe, la inmensa mayoría de los más de 90.000 abortos legales que se realizan en nuestro país se acogen al supuesto del grave riesgo para la salud psíquica de la madre. ¿Hay alguien que no sea un hipócrita que crea que de verdad existen tantos trastornos mentales graves que justifiquen médicamente un aborto? En la práctica esto supone que en España existe el aborto libre.
2. En la sanidad pública hay muchos médicos que no son objetores. Sin embargo, no están dispuestos a firmar certificados que no estén justificados, lo que conlleva que sólo se realicen aquellos abortos que derivan de una aplicación estricta de la ley.
3. No conozco un solo caso de médico objetor en la pública que realice abortos en la medicina privada. Una afirmación tan grave como la que ustedes realizan debería estar avalada al menos por algún dato contrastable.
4. España es un país donde los métodos anticonceptivos no es que no sean gratuitos, sino que ni siquiera están financiados parcialmente por la sanidad estatal como otros medicamentos. No veo cuál sería el motivo para que el aborto libre, un método que no se debe fomentar, sí debiera estarlo.
5. ¿De dónde se han sacado que el realizar abortos en los hospitales públicos es más barato? El costo de los procesos hospitalarios está relacionado con la complejidad y las prestaciones que ofrece un hospital, de modo que, por poner un ejemplo, no es rentable realizar un aborto en un centro preparado para llevar a cabo trasplantes hepáticos. Además, si los 90.000 abortos se realizaran en la sanidad pública, ¿qué sería de las listas de espera quirúrgica?
Eso a ustedes ni les preocupa, ni tienen por qué pensar en ello. Es más sencilla la demagogia.
© Diario EL PAÍS S.L. - Miguel Yuste 40 - 28037 Madrid [España] - Tel. 91 337 8200
© Prisacom S.A. - Ribera del Sena, S/N - Edificio APOT - Madrid [España] - Tel. 91 353 7900
No hay comentarios:
Publicar un comentario