Crispación política, corrupción urbanística, violencia de "genero", acoso escolar, aborto libre (de hecho), eutanasia encubierta, botellón, consumo de estupefacientes, mafias del Este, accidentes laborales, contratación de ilegales, televisión basura, fracaso educativo, ínfima tasa de natalidad,
crisis del modelo de Estado, terrorismo, nacionalismos separatistas, descristianización...
Y ahora el IPF (Instituto de Política Familiar) advierte que España se convierte en el país de la Unión Europea con mayor tasa de divorcios por habitante (51%).
Parece que estamos desangrándonos por todas las heridas.
Ni siquiera el fútbol va bien para todos (¡aúpa Aleti!).
y eta con poder político...
ResponderEliminar... y económico, que político y mediático ya tenía, que se lo damos nosotros...
ResponderEliminarPoco sé de política española, pero de divorcio como plaga y "derecho humano" sí,y acá ha llegado; al final, pero llegó. ¡Qué desgracia!
ResponderEliminarPero conviene que estéis enterados de lo que estamos haciendo aquí, para hacer todo lo contrario, porque de otro modo corréis un gravísimo riesgo de transitar por nuestra misma senda, camino del mismo precipicio: el que avisa no es traidor.
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