Gregorio Peces Barba -Rector Magnífico y Comisionado del Gobierno- es el sumo pontífice español del Laicismo, la nueva religión de las democracias avanzadas. Hace cosa de dos o tres días parece ser que dijo, entre otras lindezas, que los nacionalismos, la Iglesia católica y la oposición política eran "obstáculos para una España cohesionada".
Lo de los nacionalismos lo entiendo, es bastante evidente; pero lo de la Iglesia y la oposición... Quizá se trata de que Iglesia y oposición no piensan como don Gregorio, y claro, así no hay manera de conseguir una España cohesionada.
Pero entonces también podríamos decir contrario sensu , que el gobierno y don Gregorio son obstáculos para una España cohesionada...
A ver, ¿por qué no lo dejamos en una España libre, don Gregorio?
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